Presentación

Este es un espacio abierto y plural de lectura colectiva. Exploramos las posibilidades que nos ofrece de la tecnología pra comunicarnos también desde aquí, construyendo y porque no desconstruyendo mitos y saberes con el objeto de descubrir pistas, debatir, y desarrollar propuestas de convivencia escolar.

CARPE DIEM

CARPE DIEM
El lago Nahuel Huapi, al atardecer desde el Cerro Otto

Viaje de egresadas CMA 2008

Les deseo un hermoso viaje. Ya falta muy poquito. Disfruten. Miren, miren mucho, llénense los ojos de paisajes, de inmensidad, de los secretos del lago y la montaña. Un abrazo hasta la vuelta, María Claudia

domingo, 17 de agosto de 2008

Tecnicas de integración.

Estas técnicas pretenden ir logrando una mayor integración de los miembros de los grupos, entendiendo que integración no significa uniformidad sino que supone siempre la individualidad de cada persona.El objetivo principal es que cada uno sea respetado y valorado en su realidad única. Asimismo estas técnicas ayudan a identificar dificultades de integración, remover obstáculos para el mutuo aprecio, acelerar el proceso natural que sería demasiado lento, mover relaciones con tendencia a estancarse o solucionar relaciones que se vuelven difíciles, aprender a encontrarse con las demás personas en un nivel más profundo.
El/la docente debe prestar atención al grado de conocimiento entre los/las alumnos/as para seleccionar el grado de profundidad que se puede abordar en la integración.

Preguntas indiscretas
Objetivos:
*Generar un clima de confianza y respeto favorecedor del intercambio grupal.
*Favorecer el conocimiento y la integración grupal.
Desarrollo de la actividad:
Se forman grupos de 6 alumnos al azar (preferentemente que no pertenezcan a los mismos grupos naturales). A cada grupo se le entrega un dado y un juego de cartas, las cuales deberán agruparse de acuerdo a su número y se pondrán en el centro de la mesa con la cara de las preguntas hacia abajo. Se entrega a cada alumno una carta en blanco que lo habilitará a no contestar la pregunta y que podrá ser usada una sola vez. Un/a alumno/a comienza el juego tirando el dado y sacando una carta de la pila correspondiente. Luego deberá leer la pregunta y responderla, o bien usar su carta en blanco. Continúa el/la compañero/a de la derecha, y así sucesivamente hasta que se termine el tiempo destinado a esta experiencia de integración.
Material necesario: un juego de cartas y un dado cada seis alumnos
Tiempo aproximado: 60 minutos

Paula Ingaramo

jueves, 7 de agosto de 2008

Compromiso de convivencia (Marisol Viso)

  • Perfil del alumno al que va dirigido el compromiso de convivencia.
  • El que no acepta las normas establecidas en el aula
  • Aquel con bajo grando de disciplina y/o conductas contrarias a las normas de convivencia
  • Aquel con numerosas faltas de asistencia sin justificación y que dificultan su integración
  • Alumnas con problemas de atención y aprendizaje que deriven en problemas de conducta
  • Los que tienen dificultades para su integración escolar

Contenidos del compromiso de convivencia

Contenidos de compromiso que podrían adquirir las familias:

  • Asistencia diaria y puntual del alumno al centro
  • Controlar que el alumno asista con materiales necesarios
  • Colaboracion para las tareas propuestas
  • Colaboración con el centro para modificar la conducta del alumno
  • Entrevista periodica con el tutor
  • Colabaración para mejorar la percepción

Contenidos del compromiso para el centro hacia las familias:

  • Control diaria e información a las familias sobre la ausencia del alumno
  • Surgimiento de los cambios que se produzcan en la actitud el alumno e informar a las familias
  • Aplicación de las medidas preventivas
  • Entrevista del tutor con la familia
  • Entrevista del orientador con la familia.

Resolución pasifica de conflictos

Existen distintos tipos de conflictos como por ejemplo:

  • Maltrato físico
  • Maltrato verbal
  • Mixto(verbal y fisico)
  • Exclusión social

Las propuestas pedagógicas para intervenir en estos conflictos son:

  • Desarrollar y fomentar el dialogo
  • Una participación de los alumnos en clases para elaborar sus normas
  • Educación de valores
  • Aprendizaje coperativo donde el resultado depende de la actuación de todo el grupo
  • El autocontrol emosional.

Climas institucionales Lic. Fernando Onetto- (Maria del valle Angirama)

Si deseamos formar a nuestros niños y niñas, muchachos y chicas en los valores que sostienen la democracia parece necesario trabajar en ese lugar entre las personas que es el colectivo enseñante. Cultura de la institución, prácticas profesionales, paradigma de los vínculos, esquemas de comunicación, modelos de gestión directiva, mensajes inscriptos en la distribución del espacio y del tiempo, rituales, mandatos de silencio..., son un potente emisor de mensajes valorativos.

Técnicas de participación (Melisa Martín)

Las técnicas de participación son actividades para mejorar la calidad de la participación de los alumnos en los trabajos grupale y la construccionde climas grupales favorables para el desarrollo creativo e intelectual.
Son técnicas pensadas para EGB3 y POLIMODAL, esto es útil para que se trabaje la organización del trabajo en grupos de encuetros. La mejor manera de enseñar estas técnicas es la vida grupal.

Construcción de una torre:

Objetivos:
*diagnosticar los roles de cada alumno en las actividades grupales
*observar las estrategias de cada subgrupo para hacer la tarea
*Explicar la importanciadel trabajo cooperativo y el efecto de diversos modelos de la organización sobre el funcionamientode un grupo

Desarrollo de la actividad:
Se forman subgrupos de ocho alumnos, cada uno eligirá un miembro de su grupo para que sea del equipo de jueces, quienes solo evaluarán la actividad.
Se da a cada equipo los materiales y se les asigna un aula.

Consigna:
Cada grupo debe construir una torre alta, firme y hermosa en veinte minutos.
Cuando se acaba el tiempo los jueces evaluarán la construcción y eligirán al ganador.
Luego el docente discutirá con los alumnos los siguientes puntos:
-¿Cómo funcionaron los grupos en el trabajo?
-¿Hubo roles?
-¿Cómo era el clima de trabajo?
-¿Participaron todos los integrantes del grupo?
-¿Hubo relación entre las producciones y las características del subgrupo?
-¿Cómo fueron las reacciones ante la decisión de los jueces?

El lugar del supervisor frente a la convivencia y disciplina escolar

El supervisor antes tenia una funcion de control y la participacion en la administración de la escuela
Pero ahora se busca un cambio, se busca que se situe frente a la convivencia y diciplina escolar, atravez de que sea un fasilitador y que sea algo cotidiana su colaboracion. Tabien es necesario para este cambio es incorporar una dimencion pedagogica y loúltimo que se busca es que sea capaz de abordar los problemas intrapersonales como grupales en la institución. Por en fin, el supervisor puede ser facilitador y dinamizador de la tarea hacia el interior de las instituciones y el articulador entre las escuelas favoreciendo el diálogo y el intercambio de experiencia entre los mismos.
Araoz, Nadia B

miércoles, 6 de agosto de 2008

La educación en los valores democráticos Prof. Alberto Sileoni (Alderete Estefanía)

Una demanda social
Existe una demanda social reiterada para que en la escuela se enseñen valores y no sólo conocimientos.. El Ministerio de Educación de la Nación ha tomado como propio el desafío de promover una educación en valores en las instituciones educativas de todos los niveles.
Los varones y mujeres, tienen una apropiación muy grande las tecnologías de la comunicación, etc. Un número importante de las características de la cultura juvenil derivan del hecho de que estos jóvenes se han formado en un contexto cultural democrático. En gran parte nuestros jóvenes son como nosotros los hemos educado y son diferentes a nosotros porque uno de nuestros principios educativos fueron no seguir las pautas educativas de nuestros padres.. Educación en valores no es sinónimo de predicación. Educación en valores no es sinónimo de campaña por la reforma de las costumbres sociales. Una educación en valores comienza por valorar al otro.

Los mundos de la vida y la apertura a los derechos universales
Nos faltan prácticas sociales que hagan presentes los valores democráticos en nuestra convivencia cotidiana. Una educación en valores que quiera echar raíces en la vida cotidiana se sitúa en este contexto de diálogo intercultural. Se trata de establecer un diálogo entre tradiciones muy ricas, con fuerte acento comunitario, raíces territoriales profundas y fuertes, creencias colectivas y la cultura democrática que tiene carácter menos territorial y más universal.

Enseñar el respeto por la ley en las escuelas
Una de las preocupaciones sociales más extendida en nuestros días es la demanda por una mayor seguridad. El respeto por la ley es uno de los valores de la cultura democrática. El Estado democrático, se asienta en la subordinación de la autoridad a la ley. No hay diferencias ante la ley, ésta merece el mismo respeto y se aplica de la misma manera sobre gobernantes y gobernados, ricos y pobres, famosos y desconocidos. La escuela tiene mucho para enseñar y aprender acerca del respeto por la ley. Educar en valores no es emprender un camino regresivo. Educar en valores es avanzar en la construcción de una cultura democrática que impregne nuestra vida cotidiana estableciendo un intercambio respetuoso que acepte la pluralidad y construya nuevos consensos sociales. Un encuentro enriquecedor entre memoria, presente y proyectos comunes.

JUNTA DE ANDALUCÍA- AULA DE CONVIVENCIA. (Antonella Piló)

Introducción
La creación de dicha Aula dependerá, entre otros aspectos, de que el centro cuente con un número suficiente de profesores y profesoras que se encarguen de la atención educativa del alumnado que asista a la misma. Surge como una necesidad de dar respuesta a la atención educativa que requiere la diversidad del alumnado de los centros. Se plantea como una medida para intentar mejorar las conductas y actitudes de aquellos alumnos y alumnas que presentan dificultades en la convivencia y, con ello, mejorar el clima de convivencia del grupo-clase y del centro en su conjunto.

Finalidad y objetivos del Aula de Convivencia

• Habilitar un espacio que proporcione al alumnado las condiciones necesarias para reflexionar sobre su conducta contraria a las normas de convivencia, su comportamiento en determinados conflictos y sobre cómo afecta todo ello al desarrollo de las clases.
• Posibilitar el que aprendan a responsabilizarse de sus propias acciones, pensamientos, sentimientos y comunicaciones con los demás.
• Contribuir a desarrollar actitudes cooperativas, solidarias y de respeto.
• Posibilitar que el alumno o alumna se sienta competente emocionalmente y en la realización de ciertas tareas.
• Reconstruir y favorecer su autoestima y autocontrol.
• Ayudarle a adquirir una buena disposición hacia las tareas escolares.
• Resolver los conflictos de manera pacífica desde el diálogo y la reflexión.
• Compensar las deficiencias que impiden a algunos alumnos o alumnas su integración escolar.
• Educar para la vida, potenciando las relaciones interpersonales de cada alumno o alumna, es decir, para su integración satisfactoria en la comunidad.
• Mejorar la vida académica y personal del alumno o alumna.
En definitiva se pretende mejorar el clima de convivencia del aula y del centro en todos los espacios escolares: aulas, pasillos, patio, etc. Criterios y condiciones para que un alumno o alumna sea atendido en el Aula de Convivencia.
Es necesario, por tanto, que el alumno o alumna haya recibido alguna corrección por su conducta, pero no es suficiente, ya que no todos los alumnos o alumnas sancionados tienen que ser derivados a dicha Aula. Tampoco es preciso que un alumno o alumna esté toda la jornada escolar en el Aula, sino que el Plan de Convivencia deberá establecer las condiciones adicionales para que un alumno o alumna sea atendido en ella. Además, este
Plan de Convivencia del centro podría plantear otras condiciones que deberían darse, como por ejemplo:
• Ser reincidente en su actitud y conducta contra las normas de convivencia.
• Haber suscrito un Compromiso de Convivencia que implique directamente el trabajar alguno de los objetivos del Aula.
• Presentar deficiencias en su autoestima, autocontrol, relaciones personales, disposición hacia las tareas escolares o integración escolar y/o social.
• La expulsión no favorecería la corrección de la conducta y no es percibida por el alumno o alumna como un castigo.
• La atención en el Aula de Convivencia puede mejorar su actitud y sin esta atención no se garantiza que se mantenga su proceso educativo.
Asimismo, se pueden establecer en este apartado otras condiciones como:
• Número máximo de veces que un alumno o alumna puede ser derivado al Aula.
• Número máximo de días y/o horas al día de atención en el Aula.
• Número máximo de alumnos o alumnas que pueden atenderse simultáneamente en el Aula.

Criterios pedagógicos para la atención educativa del alumnado.
El Equipo Técnico de Coordinación Pedagógica establecerá los criterios pedagógicos para la atención educativa del alumnado atendido en el Aula de Convivencia. Tomando como base estos criterios, cada Departamento Didáctico deberá incluir en su programación las actividades formativas que los alumnos o alumnas realizarán durante su permanencia en el Aula, de forma que se garantice la continuación de su proceso formativo. Dichas actividades serán adaptadas en función de las necesidades y características de cada alumno o alumna.
Por otra parte, el orientador u orientadora programará las actuaciones encaminadas a favorecer un proceso de reflexión por parte de cada alumno o alumna que sea atendido en el aula, basándose en los principios que definen y determinan la Cultura de Paz. Es decir:
• Respetar la vida
• Rechazar la violencia
• Compartir con los demás
• Escuchar para entender
• Conservar el planeta
• Redescubrir la solidaridad

Procedimiento de derivación
El director o directora verificará si se cumplen las condiciones previstas en el Plan de Convivencia para la aplicación de esta medida. De ser así, reunirá al equipo educativo junto con las personas encargadas de la orientación y la tutoría para estudiar la conveniencia de derivarlo al Aula, según los criterios establecidos en el Plan de Convivencia. El director o directora, según las indicaciones aportadas por todos los miembros de la reunión, decidirá la resolución a adoptar.
Los pasos a seguir si se decide la derivación del alumno o alumna al Aula de Convivencia:
• El equipo educativo determinará las actividades formativas que éste deberá realizar, de entre las previstas en la programación de cada departamento, y las entregará, en los plazos estipulados, al tutor o tutora (o persona que se designe como responsable).
• El orientador u orientadora determinará las actuaciones dirigidas al proceso de reflexión que el alumnado deberá realizar, de entre las previstas en la Programación del Aula, y las entregará, en los plazos estipulados, al tutor o tutora (o persona responsable).
• La Dirección, con el asesoramiento del orientador u orientadora, elaborará un informe indicando el motivo, los objetivos, el número de días, el número de horas y las actividades formativas y de reflexión que realizará el alumno o alumna.
• El director o directora comunicará la resolución al alumno o alumna, a los responsables del Aula, a la familia y a la Comisión de Convivencia.
• Comunicación a la familia: El director o directora comunicará a la familia por escrito y en entrevista personal, si es posible, la resolución de derivación al Aula de Convivencia, indicando el motivo, los objetivos, el número de días y el número de horas, así como las actividades formativas y de reflexión que realizará. Durante dicha entrevista, podría solicitarse también la colaboración de la familia o algún tipo de compromiso por su parte con el fin de alcanzar los objetivos fijados. Sería conveniente que el tutor o tutora estuviera presente ya que será él quien posteriormente comunicará a la familia la evolución del alumno o alumna.
• Comunicación a la Comisión de Convivencia: El director o directora reunirá a la Comisión de Convivencia para comunicarle la resolución de derivación al Aula de Convivencia, indicando el motivo, los objetivos, el número de días, el número de horas y las actividades formativas y de reflexión que realizará. Se establecerá un plan de reuniones con el fin de realizar el seguimiento de la evolución del alumno o alumna.
• Los responsables del Aula deberían coordinarse entre sí para asegurar la atención del alumno o alumna y con el tutor o tutora, así como con los demás profesores y profesoras del equipo educativo.
• El tutor o tutora (o persona que se designe) se encargará posteriormente de realizar el seguimiento de la evolución del alumno o alumna y de comunicárselo a la familia y a las personas responsables del Aula de Convivencia.

Funcionamiento y personas responsables

El Plan de Convivencia debe recoger el horario de funcionamiento del Aula de Convivencia, así como las personas responsables de ésta. Para su creación deberá contar con un número suficiente de profesores y profesoras que por su disposición horaria y/o disponibilidad se encargue de la atención educativa del alumnado que asista a la misma. Asimismo, para la atención del alumnado dentro del Aula se podrá contar con la colaboración de profesionales del centro o del Equipo de Orientación Educativa, incluyendo al correspondiente educador o educadora social.
Las personas encargadas de su funcionamiento, en caso de atenderse en horario no lectivo, serán voluntarias. A continuación se ofrecen dos propuestas:

Propuesta 1
Las personas encargadas del Aula de Convivencia serán dos profesores o profesoras. Para su adecuado funcionamiento ambos atenderán el Aula durante sus respectivas guardias (tres horas semanales cada uno) y durante las dos horas que faltan para completar su horario lectivo, ateniéndonos a la normativa vigente. De esta forma el Aula estará atendida 10 horas semanales en total, en horario lectivo. Las personas responsables realizarán los registros de control de asistencia y calendarios de alumnado, de lo que darán cuenta a la Jefatura de Estudios, trabajarán con el alumnado y le facilitarán el material. Periódicamente informarán al tutor o tutora de la evolución del alumnado así como de su asistencia al Aula.

Propuesta 2
Estos cursos son atendidos por una plantilla de 60 profesionales que se organizan en Departamentos Didácticos. Junto al profesorado, completan la plantilla del centro dos ordenanzas y dos administrativas o administrativos.

FAMILIA CON ESCUELA 3 (Agostina Cárcamo)

Recapitulando el proceso realizado
En esta propuesta de trabajo institucional se invita a cada escuela a establecer una revisión de sus prácticas de vinculación con las familias.
En este tercer cuadernillo se propone que traslademos nuestra atención y autoanálisis a la revisión de las prácticas de celebración y de cooperación que son habituales en la interacción con las familias de los alumnos y alumnas de cada escuela.
Es hora de visualizar con más claridad cuál es la producción a la que se espera que arribe cada institución. Estas producciones finales apuntan a entender mejor el significado del trabajo docente con las familias y a mejorarlo superando los obstáculos que se perciben. El sentido de esta validación no es sólo administrativo también propicia un acompañamiento y un respaldo de parte del Estado a las experiencias e innovación y posibilita una socialización de las mismas.

Experiencia controlada de innovación en las prácticas de la escuela con las familias
El trabajo final esperado lo llamamos “experiencia controlada de innovación en las prácticas de la escuela con las familias”. A modo de orientación, se presenta a continuación un esquema con los aspectos que habría que tener en cuenta.
1- Identificación de un tema-problema en la propia relación con las familias de la escuela.
En todos los trabajos será necesario incorporar una descripción breve de la temática que generó preocupación acerca de la relación de la escuela con las familias. Reconocer las fortalezas y las limitaciones que afectan a todos: a las familias, a la escuela, a cada uno como profesional. Es importante conocer a las personas que conforman la comunidad educativa y las circunstancias que la condicionan como grupo, para poder así proyectar concretamente estrategias de mejoramiento de las prácticas.
2- Interpretación del problema seleccionado
En un segundo apartado se explicitará la propia interpretación del sentido y los motivos que llevaron a seleccionar esa problemática. Las descripciones de los problemas que muestran la presencia de conflicto entre valores se suelen ajustar mejor a la realidad.
3- El análisis de la propia práctica profesional
La propuesta es analizar la práctica identificando las actividades que la componen, en este caso se hace referencia a las prácticas instaladas en la relación con las familias. Para hacerlo se recomienda comenzar por una observación con registro de la práctica que se está desarrollando habitualmente.
Dos actitudes son recomendables:
a) Seleccionar la práctica previa en la que la comunidad escolar se siente más fuerte, con más recursos para hacer una experiencia de cambio.
b) Mantener el interés por seguir recibiendo información de la realidad y seguir revisando las propias teorías iniciales para entender mejor los problemas existentes en el vínculo con las familias.
4- Actuación controlada en sus efectos
La mejora del propio perfil profesional implica poder ejercer mayor control sobre las tareas desempeñadas y sobre las consecuencias en la vida de los que participan en ellas. Conocer y hacerse cargo de los efectos que producen las propias decisiones implica un avance moral en el propio desempeño profesional.
5- Reflexión y reajuste del plan de innovación
Luego de un tiempo prudencial se tratará de recepcionar la nueva información que proporciona esta experiencia de innovación, incorporándola para hacer los reajustes necesarios para seguir mejorando.


El registro
El registro es una herramienta vital para facilitar la reflexión sobre las prácticas profesionales porque al dejar documentada la acción permite retornar a ella de manera más pensada, ejerciendo más control y en diálogo con otros.
No es deseable que en un registro el narrador se omita haciendo una descripción neutral; los aspectos subjetivos no contaminan sino que enriquecen un registro.
Existen diferentes formatos de registro:
a) El autorregistro escrito
Es un registro realizado por el propio protagonista luego de realizar una experiencia profesional. Depende de las notas tomadas en los espacios de la acción y de la memoria que se puede hacer de ella cuando ésta constituye un pasado reciente.
b) El registro escrito realizado por un observador
Es un registro realizado en simultáneo con la acción profesional pero por parte de un observador. c) El registro grabado en audio o el video registro
Los medios tecnológicos ofrecen como ventaja el recoger no sólo la versión escrita sino también auditiva y/o visual de lo sucedido. Permiten el repaso ilimitado del registro.

Análisis del registro
El registro aunque haya sido pulido en su redacción y ordenado en su presentación no representa el último nivel de análisis de la práctica profesional. Él hablará también del que registra porque pone en juego percepciones, hábitos mentales y teorías. Sin embargo, no siempre el que está habilitado para hacer el registro lo está para promover la reflexión que éste puede generar. El análisis reflexivo de un registro no conduce a una evaluación externa de la práctica. Una práctica registrada puede generar preguntas que lleven a entender mejor lo que acontece en una institución educativa y a encontrar respuestas más adecuadas a los problemas profesionales. Hay sentidos que sólo se abren cuando nos ponemos en acción. Para encontrar estas aperturas de sentido que anidan en la práctica de cada uno y en las prácticas colectivas es necesario buscar en las incoherencias, en los aspectos que no están vinculados entre sí o que presentan contradicciones. Estos lugares son los que dan qué pensar.

Entrevista previa y posterior
La entrevista previa puede anticipar lo que se realizará en el escenario educativo concreto. También puede focalizarse la observación y el registro en un aspecto de la práctica a realizar seleccionado de antemano. La entrevista posterior tratará de identificar los caminos de reflexión que abren lo sucedido y lo expresado por los actores educativos.

Encuadre, algunos aspectos éticos
Si lo sucedido en la práctica representa una transgresión comprobada grave de normas institucionales no es el registro el modo de asentarlo. Para estos casos son otros los recursos y formas de intervención. Si este no es el caso es válido recurrir al registro manteniendo la reserva de los nombres de las personas y de las instituciones; con este encuadre se facilitará la profundización y la potencia del trabajo.

La celebración como lugar de encuentro con las familias
¿Qué es celebrar?
La palabra celebrar alude a la vez a la acción de conmemorar, evocar. Cuando se habla de celebrar, bien podríamos decir que se trata de una práctica destinada a recordar que hay algo que vale la pena recordar. El recordar de la celebración es evitar el olvido, revivir un hecho del pasado. La celebración supera lo rutinario y lo formal aunque puede incluirlo. Una buena celebración se hace ella misma memorable, deja una huella en aquellos que la vivieron. La palabra celebrar se asocia también a la fiesta. Si bien no siempre lo que se conmemora es en sí mismo algo gozoso al celebrarse se rescata de este hecho su “vitalidad” lo que tiene de nutritivo para nuestra vida actual. El celebrar supone participar activamente.
No sólo el que actúa en una celebración frente a otros o el que toma parte en la organización del evento participan; también el espectador puede participar intensamente. Hay participaciones activas que son tradicionales y que se reiteran en las diferentes culturas: compartir la comida, danzar juntos, asistir a una representación dramática o ritual, etc. La mayoría de las veces las celebraciones son acontecimientos colectivos. En la celebración las comunidades se afianzan. Las buenas celebraciones generan sentimientos de pertenencia. En este sentido podríamos decir que hay en la celebración una oportunidad de apertura de las escuelas a las familias y al contexto social y comunitario circundante. El hacer partícipe a otras instituciones está en plena consonancia con el sentido de la celebración.

Familia y escuela
En el caso de las dos instituciones que comparten durante varios años la educación de los niños, la familia y la escuela, surge la pregunta acerca de qué tienen en común para celebrar. ¿Hay algo que vale la pena que recuerden, actualicen y proyecten hacia el futuro? Creemos que sí. En principio, porque vemos la educación como un proceso difícil, pero esencialmente gozoso. Porque creemos que tener en las manos la tarea de formar un nuevo ser humano, es una experiencia entrañable como pocas y, porque siempre es mejor tener educación que no tenerla. Más allá de las idas y vueltas, de las crisis ocasionales o recurrentes, las familias debieran poder celebrar el hecho de que haya una institución donde, pese a todo tipo de limitaciones, otros adultos cuidan y educan a sus hijos.
Los docentes, a su vez, pueden reconocer y valorar la confianza que les demuestran las familias, entregándoles su bien más preciado y delegando en ellos un poder sobre los niños a su cargo que, salvo a otros parientes, no suelen delegar en nadie más. Esto, de por sí, ya sería motivo de celebración, pero hay más. Ante el efecto de contagio de las “malas noticias”, a veces pasa desapercibido que la escuela sigue siendo, pese a sus problemas y debilidades, el mejor lugar donde niños y jóvenes pueden estar, fuera de su casa. En la mayoría de las escuelas suelen pasar muchas cosas buenas, y habría muchas buenas noticias que compartir, prácticamente a diario. Grandes o pequeñas. Sin embargo, tradicionalmente, y salvo que se trate de la concurrencia a actos patrióticos, las familias han ido a la escuela porque pasó “algo malo”, en el plano de la conducta y/o en el del rendimiento académico. Por lo tanto, su visita, se tiñe siempre de cierta aprensión, de actitudes defensivas. Suelen ir preparados para recibir quejas acerca del desempeño de los niños y niñas a su cargo. Su respuesta no es en general de aceptación sino de réplica y reclamo, con lo que la tensión se suele realimentar, en un círculo vicioso que hasta puede llegar a la violencia física o la demanda judicial.

¿Celebraciones o ceremonias?
Hay un tipo especial de celebración que suele llamarse ceremonia, la que según el diccionario es una “acción o acto exterior arreglado por ley, estatuto o costumbre para dar culto a las cosas divinas o reverencia y honor a las profanas”. En general, podemos decir que son este tipo de actos con características rituales, los que tradicionalmente las escuelas organizaron para realizar sus celebraciones, aunque ese criterio ha ido cambiando bastante en los últimos tiempos. Esas celebraciones ceremoniales presentan por lo menos los siguientes rasgos:
- Son formales, es decir, responde a un formato invariable, establecido por alguna normativa protocolar. (Como)
- Son preestablecidas, está normalmente fijado por calendario y es inamovible. (Cuando)
- El “qué”, en general se refiere a algún personaje o suceso extraescolar.
- En cuanto al “quiénes”, son fuertemente intraescolares, y las familias de los alumnos, sólo participan en calidad de espectadores.
Una ceremonia también puede ser una celebración. Hoy son bastante más frecuentes que hace algunos años los actos escolares en los que los padres intervienen como organizadores y como participantes activos. Claro que estos cambios son recomendables siempre que se tomen seriamente en cuenta los diversos roles de cada uno y se respeten las reglas de funcionamiento institucional.

El “vaso medio lleno “
Son múltiples los motivos de preocupación que, en ocasiones abrumana los miembros de una escuela. Hay limitaciones y obstáculos que provienen de dentro y de fuera de la institución. Estos pueden hacernos descreer de la posibilidad de una auténtica celebración escolar. Esto supone concentrarse en ver “el vaso medio lleno”, no significa falsear u ocultar, significa enfocar diferente. Significa centrarse en otro aspecto de la misma pero múltiple realidad, rescatándolo de la oscuridad en la que una mirada única lo puede recluir. Valorar positivamente, evaluar cuál es el enfoque más provechoso en relación con los efectos que se espera provocar y actuar en consecuencia.

El valor de la cooperación entre la familia y la escuela
La única forma de detener y neutralizar un juego destructivo en la interacción con otros, es iniciando un juego diferente. En el caso de la familia y la escuela, por ejemplo, sería necesario que alguno de los participantes - padres y docentes - decidiera un comportamiento distinto del habitual, tendiente a demostrar una nueva actitud y una intención de acercamiento. Lo que verdaderamente importa es colaborar en la resolución de los problemas. Precisamente, la colaboración es uno de los componentes básicos de las interacciones humanas. El otro es la competencia. Prácticamente todas las relaciones tienen algo de ambas, combinados de diferentes maneras y proporciones, a veces aparentemente contradictorias, como por ejemplo dos tenistas que colaboran para competir.
También existe la variante de quienes compiten para (o en lugar de) colaborar. Ese es el caso de muchos padres y docentes, entre quienes prevalece demasiado la competencia por sobre la colaboración, tornando disfuncional la relación. Cuando las disfuncionalidades se mantienen mucho en el tiempo, no sólo afectan a las personas sino también a la tarea creando círculos viciosos y de espirales de violencia.

Los valores que moviliza la cooperación
La cooperación implica un hacer con el otro en función de objetivos comunes. Poder unir el propio bienestar al bienestar general. La cooperación se enraíza en este sentido de lo común. Por el contrario, existen actitudes humanas que llevan a usufructuar bienes producidos por la labor de otros sin sentirse comprometidos en conservarlos o acrecentarlos. Siempre es bueno recordar que los valores se construyen en la libertad y no en la coerción. No sería deseable imponer la cooperación. Una cooperación impuesta sería algo desnaturalizado.

Los movimientos cooperativos
La cooperación ha sido un ideal que ha generado diferentes tipos de asociaciones que se reúnen buscando el beneficio de sus miembros. La libre iniciativa para asociarse, la participación, el debate y el consenso en la toma de decisiones, la construcción de una red interinstitucional son algunos de los valores que inspiran este movimiento. La propia relación con las familias podría inspirarse en algunos de estos valores. La escuela no sólo está invitada a proponer nuevas formas de cooperación con las familias sino también a recepcionar las iniciativas que vienen de ellas.

A modo de conclusión
Celebración y cooperación son los dos últimos recortes de realidad de los modos habituales de vinculación con las familias que se pueden constituir en objeto de reflexión y exploración para mejorar la práctica que hemos seleccionado. Si la institución escolar lo decide, ellos pueden constituir el contenido del trabajo final esperado, el cual se ha denominado anteriormente como: “experiencia controlada de innovación en las prácticas de la escuela con las familias”.

Cuadernillo Nº1 - Curso para preceptores (Contardi Julieta)

Introducción
El Curso de Formación para Preceptores tiene como objetivo brindar asesoramiento y apoyo técnico en:
Renovación y reajuste de las culturas institucionales escolares para incorporar los valores democráticos.
Mejoramiento de climas institucionales.
Renovación y mejora de las normas de convivencia escolar.
Construcción de acuerdos educativos familia – escuela.
Formación de supervisores como asesores en convivencia escolar.
En relación con estos objetivos, queremos contribuir a promover una mejor convivencia en la escuela.

Jornada Presencial 1: Adolescencia y escuela hoy
Actividades propuestas para la Jornada Presencial de Formación

Actividad 1
Conformación del grupo
Objetivos:
Que los participantes se presenten.
Que el grupo organice su modalidad de trabajo para los encuentros y para el trabajo autogestivo.

Actividad 2
Aspectos gratificantes y frustrantes
Poner en palabras vivencias cotidianas y reflexionar.

Actividad 3
Comparando adolescencias
Objetivos:
Comparar la propia experiencia como adolescente con la dolescencia actual.
Identificar las semejanzas
Identificar las diferencias de nuestros esquemas mentales y afectivos, y desobstaculizar la escucha.

Actividad 4
Objetivo:
Evaluar el desempeño individual y el funcionamiento grupal. Hacer algunas recomendaciones si fuese necesario.

Actividades para el trabajo autogestivo

Actividad 5
Conformación del grupo
Se propone, eligiendo las actividades a realizar y la modalidad de trabajo, la designación de un coordinador rotativo y un secretario.

Actividad 6
Adolescencia. Sus características evolutivas.
Lectura individual, del Anexo 1. Luego observar de qué modo se manifiestan las características adolescentes planteadas en los comportamientos de los alumnos en la escuela. Elaborar un listado de ejemplos.
Realizar una búsqueda bibliográfica sobre este tema.
Por último, se propone intercambiar las producciones individuales.

Actividad 7
Entrevista a un adolescente
Cada preceptor realizará una entrevista a un adolescente, registrada en audio y luego desgrabada para poder ser analizada. El grupo de trabajo elaborará un informe grupal.
Posteriormente, el grupo tratará de relacionar la información obtenida con el material teórico. Finalmente, cada grupo elaborará un afiche con las conclusiones finales.

Actividad 8
“Se busca preceptor”
Redactar grupalmente una carta dirigida a un candidato a ingresar como preceptor dándole recomendaciones para un buen desempeño de su rol.

Actividad 9
Evaluación del funcionamiento grupal
Hacer una evaluación conjunta. Expresar recomendaciones para mejorar

Jornada Presencial 2:
Instituciones educativas y Convivencia Escolar

Actividades propuestas para la Jornada Presencial de Formación

Actividad 1
“Cuestión de preceptores”
Leer “Cuestión de preceptores” (Anexo 2).
Intercambiar impresiones.
Hacer un listado de los hechos importantes.
Imaginar y describir contextos institucionales.
Conclusiones.

Actividad 2
“Conflicto en clase”
Leer el material del caso.
Intercambio de ideas.
Formular posibles razones del conflicto.
Ubicar el conflicto como resultado institucional.
Identificar factores vinculados con el conflicto.

Actividad 3
Evaluación individual
Evalúe su propio desempeño en el grupo.
Evaluación del funcionamiento grupal.
Si es posible hacer algunas recomendaciones.

Actividades para el trabajo autogestivo

Actividad 3
Trabajo de indagación en terreno2
1) Describir el edificio.
2) Reconstruir la historia.
Recolección de datos, leer detalladamente as entrevistas, y sintetizar. Intercambiar el material y elaborar una síntesis grupal.

Actividad 4
El factor humano
Lectura del artículo “El factor humano” de Fernando
Onetto, que figura en la revista “A convivir se aprende” y hacer una búsqueda de bibliografía. Intercambio breve sobre lo leído y formulen nuevas explicaciones.

Actividad 5
Evaluación del funcionamiento grupal
Expresar recomendaciones para mejorar el funcionamiento de los encuentros.

ANEXO 1
Palabras para adolescentes o el complejo de la langosta

“La adolescencia es el período de pasaje que separa a la infancia de la edad adulta…”

“...La adolescencia es como un SEGUNDO NACIMIENTO que se realizaría progresivamente. Constituye una mutación. Esto causa, por momentos, la impresión de morir...”

“...Hay INSEGURIDAD y falta de confianza en sí mismo…”

“...LAS LANGOSTAS, cuando cambian de caparazón, pierden primero el viejo y quedan sin defensa por un tiempo, hasta fabricar uno nuevo. Durante ese tiempo se hallan en gran peligro. Para los adolescentes viene a ser la misma cosa...”

“…La adolescencia es además un movimiento pleno de fuerza, de promesas de vida, de expansión... Como los brotes que salen de la tierra, uno tiene necesidad de ‘SALIR’…”

“...En la adolescencia, uno se construye una imagen ideal de sí mismo basada en los criterios de la pandilla, es una manera de afirmarse... Es un signo de alianza, de integración…”

“…La amistad es absolutamente esencial, sobre todo durante un período en el cual se cambian las relaciones que se mantiene con la familia.”

“…Uno se busca un DOBLE, un ALMA HERMANA, un ALTER EGO…”

“... Uno busca identificarse, ser parecido a los otros. Por miedo a ser rechazado…”

“Se temen las DIFERENCIAS como si amenazaran al grupo, cuando en realidad lo construyen.”

“La autoridad es asunto complicado. Cuando hay demasiada no es soportable. Cuando no hay bastante uno se siente un poco abandonado.”

“...Hay ADULTOS CREIBLES que ejercen una autoridad inteligente…”

“...Mediante el LENGUAJE, la CREATIVIDAD y la CONVIVENCIA, pueden evitarse la violencia y el sufrimiento.”

“...Hay que buscar grupos donde encontrarse juntos para intercambiar ideas sin perder el sentido crítico, y crear algo…”

“…En la adolescencia, uno se encuentra como ‘perforado’ de DESEOS y de necesidades materiales, mientras que uno mismo no ha tenido nunca la responsabilidad de un presupuesto. Y no es fácil resistir a la tentación...”

“Robar, mentir, es siempre una manera de decir algo. Cuando el robo o la mentira son descubiertos, uno es castigado, lo que es justo. Pero resulta una lástima que tan frecuentemente no se hable de lo que se ‘puso sobre el tapete’ por medio de ese robo o esa mentira, que son en verdad medios para decir algo que no anda bien…”

“...Crecer, para un ser humano, es ser cada vez más responsable de sus actos. Es una verdadera suerte encontrar adultos que saben castigar y al mismo tiempo ayudan a comprender la significación del acto cometido sin culpabilizarnos.”

ANEXO 2
Caso: “Cuestión de Preceptores”
Osvaldo y Mariano, preceptores de los terceros y quintos años respectivamente, conversan sobre su trabajo. Aquí se ponen de manifiesto distintas actitudes de los preceptores frente a su trabajo: por un lado, hay una preocupación por el bienestar y las situaciones personales de los alumnos y por otro lado se impone solamente el cumplimiento del trabajo sin importar lo que les pasa a los alumnos.

ANEXO 3
Caso: “Conflicto en clase”
Se produce un conflicto entre dos alumnos en hora de clases donde la profesora a cargo interviene llamando al preceptor para que se ocupe del problema, quien los cita a los dos alumnos y conversa y reflexiona con ellos. Uno de los estudiantes tenía muchos problemas actitudinales y su situación en la escuela era bastante complicada, ya no se podía sostener más. Este muchacho fue suspendido por una semana de la escuela. Nunca retornó. Tampoco quiso ingresar en otra escuela a pesar de que se le ofreció el traslado. Su única opción fue salir a buscar trabajo pues así lo quiso él y así lo dispusieron sus padres.

martes, 5 de agosto de 2008

TECNICAS DE CONOCIMIENTO (Ana Paula Inglesias)

Técnicas de conocimiento
Estas técnicas promueven el inicio de un proceso de conocimiento recíproco entre los integrantes del grupo clase, estableciendo un clima de mayor colaboración y entendimiento.

Ficha personal
Esta ficha se presenta como un insumo para la instancia diagnóstica de los grupos y de la situación particular de cada alumno.
Objetivos:
• Conocer algunos aspectos globales de cada alumno.
• Configurar a partir de las impresiones individuales acerca del curso, una visión global del mismo.
Desarrollo de la actividad: cada alumno completa la ficha en forma individual y se entrega al docente Material necesario: una ficha para completar por alumno Tiempo aproximado: 20 minutos

Frases incompletas
Objetivos:
• Favorecer el autoconocimiento y el conocimiento mutuo entre los alumnos.
Desarrollo de la actividad: se entrega a cada alumno una ficha que completará de manera individual. Posteriormente cada alumno elegirá tres frases para compartir con sus compañeros, quienes estarán organizados en subgrupos de seis alumnos. El docente puede recoger estas frases las cuales le ayudarán a conocer más a sus alumnos, y podría ser la base para futuras entrevistas individuales.

lunes, 4 de agosto de 2008

Familias con la escuela (NATALIA BASALDELLA)

FAMILIAS CON LA ESCUELA

Es importante que los adultos que conviven con los niños en los distintos ambientes los ayuden a lograr sus objetivos escolares y su maduración como personas.

Lo que este programa propone es ayudar a cada escuela a que mejore su vínculo con esos adultos. Lo ideal seria que se lleguen a acuerdos concretos entre familias y escuelas.

Los adultos cotidianos a cargo de los alumnos no solo serian destinatarios, sino fundamentalmente protagonistas de este proceso.

Cada escuela optar{a por diferentes formas y grados de implicación de las familias.

La idea de este programa no trata de juzgar ni de dar consigna de como educar a sus hijos, sino de sus propias practicas institucionales y profesionales.

La propuesta que tiene la escuela es profesionalizar su relación con las familias y observarse a si mismos, porque su desafío es convertir su propia practica profesional en objeto de su propia reflexión.

Se debe evitar que la concentración del {ámbito de trabajo nos haga perder de vista el contexto general en el que estamos insertos:

TRENSFORMACIONES:

Fenómeno tecnológico: no solo son bienes materiales sino también de cultura tecnológica que atraviesa todas las capas sociales.

Fenómeno Femenino: Nunca tantas mujeres pudieron hacer tantas cosas en tantos aspectos. El desarrollo emancipatorio de la mujer supone un refuerzo de la autonomía humana.

Fenómeno juvenil: niños nacidos en el siglo xx son protagonistas de un movimiento juvenil cultural a nivel mundial.
Los jóvenes han pasado a constituirse en actores sociales importantes con su propio lenguaje, su dominio de la tecnología, una autonomía en expansión.

Hay también una crisis del pacto de los adultos que se refiere a cuales son las mejores formas de criar y educar a los menores a su cargo (padres y maestros).

Muchos padres no atribuyen a los maestros la suficiente “autoridad” para evaluar la conducta individual o social de sus hijos y muchos docentes acusan a sus padres de los problemas escolares de sus alumnos.

Los adultos juegan un rol decisivo en la construcción de la identidad del niño.

Hay una modelación de la propia identidad desde la representación del otro. La primera manera de ser uno mismo es desear parecerse al otro.

Un segundo movimiento de construcción de la propia identidad consiste en diferenciarse del otro e independizarse.

La construcción de la subjetividad de los niños no se hace solo por vía verbal sino también a través de la comunicación que se da por el comportamiento, la presencia o ausencia y los sentimientos.

Toda esta construcción que se le da al niño es el campo de los valores (conjunto De cualidades del mundo real que nos atraen, constituyen nuestros objetivos de vida y organizan nuestras prioridades).

Los adultos más significativos para la vida de los niños son aquellos que han convivido con ellos bajo el mismo techo desde la infancia.

Es importante valorar a los adultos que de hecho son referentes reales que tienen a cargo el cuidado de los niños.

• Criterios que darían una buena cooperación entre familias y escuelas:

-Calidad de la comunicación
-Distribución de los roles que respete los campos de incumbencia.
-Intercambio que accede a acuerdos operativos.

Propuestas de trabajo: Llegar a compromisos posibles de sostener, concretos y reconocibles.

-¿Estamos de acuerdo en la relevancia del fenómeno tecnológico, femenino y juvenil en la relación educativa entre adultos, niños y jóvenes?

-¿Añadiríamos otro aspecto sociocultural de fuerte influencia?

- Si tuviéramos que expresar en una imagen la relación escuela-alumnos-familias, ¿qué imagen elegiríamos y porqué? (Por ejemplo: tres islas, dos veredas, un barco con tres tripulantes, un campo de batalla, una red, otros.)

- Recordemos las dos últimas entrevistas que cada uno ha tenido con familias de nuestros alumnos. ¿Hace cuánto tiempo fue?, ¿cuál fue el motivo?, ¿qué sentimientos experimenté al terminar esas entrevistas?, ¿creo que hay un acuerdo educativo entre docentes y adultos a cargo de los alumnos?

• Propuestas de análisis: Hacer un microanálisis para valorar, entender y resolver los problemas que presenta la práctica profesional.

-¿Cuáles podrían ser los motivos que en ocasiones dificultan a los padres o tutores aceptar que su niño/a tenga dificultades o no se comporte adecuadamente en la escuela?

- ¿En qué aspectos la familia tiene mejor información que la Escuela sobre los alumnos?

¿Nos cuesta aceptar la realidad de las familias de nuestros Alumnos: su composición, sus limitaciones, sus conflictos Internos? Si tuviéramos dificultades, ¿podríamos explicarlas?

Técnicas de relevamiento de información - (Paula Gomez)

La convivencia escolar es algo que no se puede medir en forma exacta. Tendremos que elegir métodos que nos permitan dar cuenta de procesos y de sus tendencias.

Cuestionario
Es uno de los instrumentos más utilizados para obtener opiniones Existen cuestionarios de respuestas cerradas y de respuestas abiertas. El de respuesta cerrada pide al entrevistado la elección de una de las respuestas ofrecidas en el instrumento. Un cuestionario de respuestas abiertas solicita de los sujetos a quienes se requiere su opinión, que se explayen, que se expliquen de manera menos acotada, menos canalizada.
Las formas de preguntar varían pudiendo elegir una forma que se considere más apropiada a los grupos y personas que forman parte de la comunidad. Lo importante es evitar que las respuestas guiadas sean demasiado cerradas, de modo que las respuestas queden limitadas en ciertos parámetros establecidos previamente. Para evitarlo hay que probar las preguntas previamente.

Encuesta
Con el objeto de apreciar alguna tendencia específica podemos utilizar la encuesta. Una ENCUESTA es el pronunciamiento sobre algún aspecto específico que cualquier persona integrante de la comunidad escolar está en condiciones de responder. Lo importante en este caso es la precisión respecto de lo que se quiere saber, que no se produzcan confusiones con otros aspectos. En este caso las preguntas son directas y las respuestas posibles están orientadas previamente.

Escala
Las ESCALAS pueden mostrar reacciones y actitudes de un grupo de personas frente a determinados hechos de la realidad, mostrando el grado de aceptación o rechazo ante estas afirmaciones. Este instrumento, debe orientarse a temas específicos que interese descubrir Quienes elaboran la escala deben determinar una pauta de corrección y un puntaje apropiado a cada respuesta. Lo importante es que esa escala debería reflejar las actitudes de las personas frente a determinados hechos, propuestas, opiniones y juicios previamente establecidos.

viernes, 1 de agosto de 2008

NORMAS Y COMPROMISOS. (Ma. Jael Rush)

Normas de convivencia

Numerosos centros escolares han incorporado entre sus quehaceres actividades que favorecen la convivencia. En unos colegios o institutos, se realizan actividades en torno a las normas de convivencia, mientras en otros se preparan con gran cuidado las conmemoraciones del día de la paz o de la mujer trabajadora. Igualmente, en unos niveles educativos se utilizan los cuentos como recurso para avanzar en el conocimiento de las emociones, y en otros se habilitan recursos de mediación para la regulación de los conflictos. A pesar de esta diversidad, nuestro objetivo inicial en este trabajo es describirlo brevemente desde una perspectiva funcional. En él son fundamentales los conceptos de convivencia, conflictos y sentimientos. Es importante que el Plan de Convivencia de los centros incorpore las rutinas de actuación que deben ponerse en marcha en circunstancias en que el comportamiento del alumnado, de las familias o del propio profesorado no es acorde al marco normativo. Además, especifican que la divulgación de las normas o, como recomendamos, su desarrollo, junto a las correcciones, y su seguimiento pueden formar parte del Plan de Convivencia del centro y de los contenidos de la tutoría. Adicionalmente, se incorporan los recursos del Aula de Convivencia y del Compromiso de Convivencia para flexibilizar las actuaciones correctoras y comprometer a las familias de manera más directa en estas tareas. Por otro lado, las órdenes de acción tutorial, tanto de Primaria como de Secundaria garantizan la coordinación de los tutores y tutoras y la realización de actividades sobre cohesión de grupo y normas, así como la coordinación de los equipos educativos, aspectos fundamentales para la eficacia de estas actuaciones.

Desarrollo y respeto a las normas de convivencia

En los últimos años se han publicado varios estudios en los que se recaba la opinión del alumnado, profesorado y familias respecto a la existencia, utilidad y aplicación de las normas de convivencia en los centros escolares. También, se han proporcionado datos estadísticos respecto a las transgresiones más frecuentes de las normas de convivencia y sus correcciones habituales. Existe un consenso amplio respecto a la necesaria existencia de normas de convivencia en los centros escolares y una opinión favorable sobre la efectividad de los mecanismos que ofrece el centro para aprobar, explicar y difundir las normas de funcionamiento. Sin embargo, en muchas clases de Secundaria no se desarrollan actividades sobre normas. De hecho, sólo un 45% del profesorado y del alumnado de Secundaria afirma que se realizan.
Por otro lado, gran parte del profesorado y del alumnado entiende que se producen agravios en el modo en que se aplican las normas y las correcciones en el centro. Casi el 40% del alumnado y un 20% del profesorado de secundaria creer que el profesorado no tiene el mismo criterio cuando aplica las normas del centro.
Otro dato importante que se desprende de estos estudios es que la categoría más frecuente de conductas que atentan gravemente contra la convivencia es la acumulación de faltas leves Adicionalmente, se informa que un grupo de alumnos reducido acumula un número de partes considerable. Por último, el Informe del Consejo Escolar de Andalucía (2005) destaca que la corrección más frecuente para las conductas que atentan gravemente contra la convivencia es la expulsión del centro. Cuando se trata de faltas leves, sin embargo, es habitual que se imponga la realización de tareas fuera del horario escolar. Además, es habitual que el profesorado, especialmente el tutor o la tutora, se entrevisten con quien se comporta de manera inadecuada y con sus padres y madres.

Necesidad de mejorar las actuaciones relacionadas con las normas de convivencia
Desde la propia experiencia, se desprende que se deben mejorar las actuaciones. En primer lugar, parece evidente que en muchos centros hay que trasladar las actividades sobre normas a las clases. Especialmente en tercer ciclo de primaria y secundaria obligatoria las actuaciones de gestión de normas pueden ser de gran relevancia. Además, hay que fortalecer la coordinación entre el profesorado al utilizar el marco normativo y aplicar las correcciones. No es deseable, por ejemplo, que los miembros de un Claustro de Profesores procedan de modo heterogéneo cuando un alumno o alumna llega tarde a clase, no ha realizado las tareas escolares del día anterior, ha insultado a un compañero, etc. Si se quieren utilizar las normas con eficacia y como un recurso de cohesión, es imprescindible la coordinación estrecha entre el equipo educativo. La categoría más frecuente de conductas contrarias y gravemente perjudiciales para la convivencia es la reiteración de faltas leves. Este dato señala claramente que realizamos un uso inadecuado de las normas. En este seguimiento debe colaborar todo el equipo educativo. Las normas suelen ser muy eficaces para aliviar problemas de disciplina, en los inicios de trimestre o en momentos en que su incumplimiento sea patente, conviene hacer pequeñas sesiones de revitalización y concienciación de su relevancia. Igualmente, cuando se sigan de modo habitual, deben usarse la felicitación y el reconocimiento por el buen proceder del grupo o de algún individuo.
Un tercer aspecto que debemos considerar es el tipo de correcciones que se aplican en los centros escolares. Ante las faltas graves, parece que el único recurso disponible es la expulsión del centro, mientras que ante las leves suele utilizarse la entrevista y, en algunos niveles educativos, la realización de tareas fuera del horario escolar. Se requiere un esfuerzo creativo para incorporar otras estrategias correctoras menos genéricas y más vinculadas a la propia norma que no se ha respetado. Limpiar lo ensuciado, ordenar lo desordenado, estudiar lo no estudiado, cooperar en tareas colectivas, pedir disculpas, etc. pueden ayudar a que un alumno o alumna se reubique en el grupo. La ayuda de las personas responsables de la Orientación y de la familia, así como de otros profesionales, pueden ser especialmente valiosas.



Convivencia, conflictos y sentimientos
El término convivencia describe la realidad física de vivir en compañía de otro u otros o de cohabitar con ellos. Pero su significado incorpora también las propias consecuencias psicosociales de ese hecho. Viviendo con los demás, maduramos, nos socializamos, incorporamos los productos culturales, colaboramos en las tareas colectivas y tenemos oportunidad de alcanzar nuestras metas más existenciales. Relacionándonos con los demás, contribuimos al grupo y nos afirmamos personalmente. Además, incorporamos las normas, las reglas de acción, las actitudes, los valores y los preceptos que van configurando los estándares de referencia para la regulación de las propias interacciones sociales y de nuestras propias acciones, y vamos estableciendo nuestras propias metas y objetivos. Lo que llamamos convivencia está estrechamente relacionado con el seguimiento de esas normas y el empeño que ponemos en el logro de los objetivos colectivos. No obstante, en todos los grupos suelen aflorar situaciones en las que las relaciones entre algunos de sus miembros son conflictivas. El conflicto no es algo ajeno a la convivencia, sino una parte fundamental de ella. Aunque habitualmente prevalecen en nosotros las actitudes y los objetivos del grupo, en circunstancias o momentos particulares los intereses individuales pueden ser tan apremiantes que no se respetan las normas. Son situaciones en que nos distanciamos del propio grupo o de alguno de sus individuos y, para regresar y reubicarnos en el marco normativo y de valores del grupo, debemos hacer un esfuerzo.
Hay que aceptar, además, que ningún listado de normas, por muy exhaustivo que sea, puede impedir que surjan conflictos. En numerosas circunstancias, manteniéndonos en el respeto a las normas y en el esfuerzo por el logro de los objetivos del grupo, puede ocurrir que sus miembros tengan planteamientos diferentes sobre un asunto. Se trata de situaciones en que el comportamiento o actitud de ambas partes es legítima, se adecua a las normas y objetivos del
grupo, pero es incompatible. Los sentimientos son el tercer elemento importante de nuestro marco global de actuación. Ellos inundan nuestras relaciones sociales. Están determinados por lo que acontece en una situación y, al mismo tiempo, determinan la manera de relacionarnos con los demás. La acciones interpersonales, sean amigables o conflictivas, suelen ir acompañadas de algún tipo de afecto. Cuando nos damos cuenta de que otra persona no respeta las normas o los valores del grupo, o cuando entendemos que alguien no coopera o colabora para el logro de los objetivos colectivos, nos sentimos enfadados o indignados. El grupo crea héroes y puede colaborar para que algunos individuos se sientan estigmatizados.
Las emociones surgen en circunstancias en que nuestros intereses están en juego y en las situaciones de convivencia y de conflicto lo están. Nuestro sistema educativo se enfrenta al reto de transmitir y afianzar las normas y los valores que nos hemos dado socialmente, instruir en la regulación amigable de conflictos y educar en sentimientos con el fin de favorecer las relaciones interpersonales.


Las normas como un recurso educativo para facilitar la convivencia
Cualquier grupo social crea reglas de comportamiento para favorecer el logro de sus metas más distintivas. En la familia, en una empresa, en un hospital, en cualquier grupo existen normas que tienen como objetivo afianzar la cohesión del grupo y favorecer el logro de sus metas. Si los individuos de un colectivo son protagonistas de su desarrollo, las normas pueden fortalecer sus vínculos y su identificación con el propio grupo.
En todos los centros docentes debe existir un marco normativo importante que ayude a alcanzar los objetivos educativos en los que está comprometido. Se trata de un grupo de normas sencillas, comprensibles, funcionales y suficientemente exhaustivas para que todos los miembros de la comunidad educativa tengan claro lo que se espera de ellos. Lo habitual es que estas normas, con sus correcciones, se difundan entre el profesorado, el alumnado y las familias para garantizar su operatividad. Adicionalmente, es necesaria su revisión periódica para que siempre sean relevantes y útiles. De manera más restringida, también en muchas clases, se pueden realizar actividades sobre normas. Dependiendo del nivel educativo, el alumnado junto con el tutor o la tutora y el resto de miembros del equipo educativo participan y gestionan sus marcos de relación distintivos de acuerdo con las peculiaridades, intereses, problemas particulares, etc. de dicha clase. El objetivo de esta tarea es potenciar la conciencia de grupo, de colectivo comprometido en el logro de asimilar conocimientos, afianzar destrezas y valores, y conseguir la cooperación de todos los individuos del grupo en la consecución de tales fines.

Elaboración de las normas generales
del centro

Las normas de convivencia tienen sentido dentro de un colectivo, fuera de él no tienen ninguna utilidad. Nos las proporcionamos para lograr objetivos de grupo y para regular nuestras relaciones interpersonales.
Se justifican porque vivimos en grupo, convivimos con otras personas y tenemos objetivos comunes. Sin conciencia de grupo, sin considerar que quienes nos rodean tienen los mismos derechos que nosotros, las normas de convivencia son más una imposición que un valor social. Cuando nuestras metas y logros son compartidos es más fácil acercarnos al sentimiento de plenitud personal.
Existe una estrecha relación entre normas y valores, pues las primeras se sustentan en las segundas, pero son recursos funcionalmente diferentes.
Es importante incorporar alguna actividad, sea reflexiva o más comportamental, en la que se haga patente la necesidad de las normas de convivencia.
Adicionalmente, es importante que el alumnado se sienta protagonista en su elaboración, pues la convivencia no es patrimonio de nadie en particular, sino de todos los que viven juntos. Conviene también ilustrar en las actividades, que las normas se sustentan en nuestros valores sociales. Pero es importante diferenciar las actividades de educación en valores de las relacionadas con las normas. Las normas de convivencia ayudan a regular comportamientos y describen con precisión las acciones que deben ponerse en práctica.
Las normas describen comportamientos y acciones que favorecen la cohesión del grupo, la coordinación de esfuerzos y el logro de las metas colectivas. Las normas, en vez de enumerar prohibiciones, deben recoger lo que hay que hacer. A veces no es fácil formularlas en positivo, pero conviene hacer ese esfuerzo.
Otro aspecto importante es la incorporación de correcciones. Cada norma debe ir acompañada de sus correcciones. Sin ellas, la utilidad de las propias normas es muy restringida y puede generarse una conciencia de impunidad. Cuando alguien se conduce de modo inadecuado, es razonable que asuma la responsabilidad de sus hechos. Dentro del grupo no caben los agravios comparativos.
Las correcciones también deben acordarse en el grupo con una formulación clara, precisa, sencilla y, por supuesto, educativa.
Al elaborar las normas, es importante reflexionar también sobre el uso del castigo. Sin embargo, no podemos olvidar que nuestra sociedad utiliza el castigo para regular muchos comportamientos individuales y que las propias disposiciones legales relacionadas con la educación también lo incorporan como un recurso corrector. Afortunadamente, ya no se utiliza en nuestro país el castigo físico, pero la expulsión de clase o de centro, realizar tareas escolares durante el recreo o no participar en las actividades extraescolares son formas de castigo que se utilizan habitualmente.
Si se decide utilizar el castigo como corrección, debemos intentar usarlo con la máxima eficacia, junto a otras estrategias educativas que ilustren en positivo lo que debe hacerse e intentando reconducir su coste sentimental. El castigo tiene como objetivo disminuir la frecuencia de un comportamiento inadecuado, pero no es una guía positiva sobre lo que debe hacerse. Es importante, por tanto, complementarlo con otras estrategias que ilustren y hagan explícito el comportamiento deseable. Si se decide utilizarlo, es importante que:
• Quien sea castigado conozca de antemano la vinculación entre su incumplimiento de norma y el propio castigo (es recomendable su aplicación inmediata tras el comportamiento inadecuado).
• El castigo realmente ocasione un sentimiento de desagrado o malestar que disuada a quien lo sufre de repetir el comportamiento inadecuado.
• Vaya asociado a un conocimiento claro de cuáles son los comportamientos adecuados.
• Tenga en cuenta la situación personal de cada alumno o alumna. En muchos centros escolares, se expulsa con frecuencia a algún alumno o alumna de una clase o del propio centro.
También es de gran relevancia la generalización de las normas, y sus correcciones, más allá del aula. En todo el centro, en casa, en cualquier circunstancia hay que seguir las normas de convivencia básicas. El respeto a los demás hay que mostrarlo en cualquier circunstancia. Escuchar, atender, dar las gracias, pedir perdón, etc. son destrezas sociales básicas en nuestro entorno social. Por ello, es fundamental que las familias conozcan las actividades sobre
normas que se realizan en el centro y se esfuercen en casa para proceder de manera semejante. La coordinación entre centro y familias se hace imprescindible.
Algunas normas regulan pautas de comportamiento en el centro, otras en un nivel educativo específico y otras en una clase en particular. En cualquier caso, no debemos olvidar que las actividades sobre normas son sólo uno de los pilares de la convivencia. La regulación amigable de los conflictos y la educación en valores y en sentimientos también deben formar parte de las actuaciones de los centros.


Elaboración de las normas del aula
Los alumnos y alumnas de una clase van a estar durante mucho tiempo juntos, realizando actividades y conviviendo. Es importante que se potencie su conocimiento y confianza mutua, especialmente, en los inicios de curso o cuando se incorpora alguien nuevo al grupo. Por otro lado, la toma de conciencia de pertenencia al grupo-clase ayuda a establecer y a esforzarse por el logro de objetivos comunes, y a fortalecer las habilidades de diálogo, participación, discusión, toma de acuerdos, defensa de puntos de vista, etc. Cuando alguien se considera miembro activo de un grupo y protagonista de su destino es más fácil asumir y compartir unas reglas de juego para que la clase funcione mejor y sea más probable alcanzar las metas colectivas. Cualquier actitud hostil, suspicaz, individualista, competitiva, etc. puede entorpecer la tarea. Para lograr estos objetivos, deben llevarse a la clase actividades en las que el alumnado sea el protagonista.
El centro ya dispone de un conjunto de normas y correcciones genéricas que garantizan su funcionamiento. Cada clase se dota a sí misma de unas pocas normas y correcciones particulares para garantizar los derechos y deberes de todos sus miembros. La elaboración de las normas debe apoyarse en actividades en las que el alumnado tenga un papel fundamental y por ello al realizarlas, deben tenerse en cuenta algunas ideas sencillas pero muy funcionales.
Hay que desarrollar actividades que ayuden a precisar los problemas concretos y cotidianos del grupo. El objetivo de estas actividades no es hacer un inventario inabordable de problemas o comportamientos inadecuados sino aliviar los cuatro o cinco comportamientos que entorpecen de modo sustancial el logro de las metas colectivas. Conviene que siempre esté disponible en el aula un pequeño resumen de las normas, con sus correcciones, aprobadas por el grupo, así como un cuadrante en el que poder anotar cualquier comportamiento inadecuado. Además, las anotaciones hay que realizarlas de manera fluida, sin interrumpir el desarrollo de las actividades. El profesorado debe ser cuidadoso y preciso al cumplimentar el parte de incidencias. Conviene tener actualizada la información relacionada con el respeto de las normas y las correcciones. El seguimiento ayuda a detectar normas o correcciones inservibles que deben ser cambiadas o puede utilizarse para felicitar al propio grupo por su respeto escrupuloso al marco normativo.